El gesto de la Universidad Pública de Granada significa el reconocimiento de una institución laica y pluralista a la contribución de un teólogo cristiano que, durante muchos años y de manera incansable, ha ofrecido a la sociedad española una reflexión profundamente valiosa y constructiva, buscando siempre una convivencia más humana, digna y dichosa.
No voy a hablar de sus grandes trabajos teológicos: su último libro: «La humanización de Dios» es un gran regalo para los cristianos de nuestros tiempos. Yo quiero destacar aquí, la ayuda impagable que José María Castillo ha prestado a tantos hombres y mujeres que han encontrado en sus escritos y en sus palabras la mejor orientación para vivir su fe de manera más humana y liberadora.
José María ha sido un guía espiritual que ha enseñado a creer en Jesucristo de manera nueva, más fiel al Evangelio y al Espíritu del Profeta de Galilea. Pienso en obras como: «Víctimas del pecado»; «Dios y nuestra felicidad»; «El reino de Dios. Por la vida y la dignidad de los seres humanos»; «El seguimiento de Jesús».
Quiero también decirle a José María mi agradecimiento en nombre de tantas personas alejadas de la práctica religiosa, que, en su búsqueda de un sentido y una esperanza más plena a sus vidas, han encontrado luz y fuerza en sus escritos.
Muchas veces he dialogado con ellos al hilo de sugerencias y planteamientos de José María. Para muchos buscadores, él es un referente y guía singular. ¡Gracias José María! Y que nos sigas aportando Evangelio durante muchos años. Lo necesitamos.
Fuente: Redes Cristianas
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